A muchos millones de años-luz de la masa planetaria que sería un día nuestra Tierra, la población del planeta Zero temía la extinción inmediata. Era un pueblo pacífico, que vivía debajo de la superficie del planeta, ya que dicha superficie era una permanente capa de hielo. La energía y calefacción se conseguía mediante un complicado enredo de tuberías que llevaban plutonio desde las fábricas hasta los reactores. Estas tuberías discurrían por la superficie en diez circuitos que quedaban refrigerados por la temperatura externa. El sistema de tuberías con su mortífero cargamento de plutonio se convirtió en tentador blanco para los Destrovianos, que querían conseguir plutonio como fuera. Equipos de saboteadores empezaron a destruir las tuberías más alejadas del centro, y estableciendo cabezas de puente. Instalaron radares, zonas de repuestos en forma de cúpula y otras instalaciones para proteger sus nuevas posesiones. Muchos jóvenes fueron enviados a morir en el empeño de parar la invasión, pero los Destrovianos siguieron ganando posiciones. El Consejo de Zero ha decidido avisar a la única persona que creen puede parar al enemigo. Esa persona ERES TÚ: EL GUNRUNNER.